Un policía local de Sant Antoni, en Evissa, detuvo el sábado a un hombre de 40 años que fue sorprendido rociando con alcohol vehículos estacionados en la calle y que confesó que había sido el autor de los incendios de contenedores de basuras. El incendiario, que aseguró al agente que le detuvo que quería "quemar el pueblo", trató de huir, pero fue reducido y conducido a las dependencias policiales.