Un niño de 12 años fue trasladado ayer a Son Espases con síntomas de ahogamiento tras ser rescatado del fondo de una piscina de una urbanización de Marratxí. Un bañista lo sacó a la superficie después de que la víctima permaneciera inmóvil en el fondo. Al parecer trataba de aguantar la respiración con otros menores cuando sufrió el percance.

Los hechos ocurrieron sobre las doce del mediodía en una urbanización situada en la calle L'Hort, en es Figueral de Marratxí. Varios menores jugaban a aguantar la respiración bajo el agua, pero uno de ellos permanecía inmóvil en el fondo. Cuando un joven bañista se interesó por él se percató de que el niño no respondía y presentaba síntomas de ahogamiento.

El testigo sacó al menor fuera del agua. Entonces, el pequeño ya no podía respirar por sus propios medios. Por fortuna, una doctora y una enfermera se encontraban entre los residentes, que habían acudido a darse un baño. Ambas practicaron al niño maniobras de reanimación cardiopulmonar hasta la llegada de los servicios de emergencia.

Las asistencias sanitarias del Ib-salut se personaron en la piscina a bordo de una UVI móvil y realizaron al niño maniobras de reanimación cardiopulmonar avanzadas durante casi una hora. También acudieron a la urbanización tres patrullas de la Policía Local de Marratxí y varios efectivos de la Guardia Civil.

Al parecer, el menor tenía pulso, pero no podía respirar por sí solo. Solo emitía pequeños ruidos. Una vez estabilizado, el niño fue trasladado en la UVI móvil hasta las urgencias de Pediatría de Son Espases, donde ha quedado ingresado. El accidente acuático ha causado una gran consternación entre los residentes y mucha preocupación por conocer la evolución de la víctima.