La muerte de Thomas Owen H., de 20 años, se debió a un doble error fatal. El turista británico de 20 años, que había llegado a Magaluf la mañana anterior, se confundió de edificio de apartamentos. Se metió en una finca cercana a la suya, subió a la planta superior buscando su alojamiento, y avanzó por un pasillo exterior. Este corredor finaliza en un murete, que el joven saltó pensado que el pasillo continuaba al otro lado. Cayó desde una altura de unos siete pisos y falleció prácticamente en el acto.

El cadáver no se descubrió hasta las once de la mañana del domingo, cuando un vecino lo vio, inerte, en la planta baja del edificio Edén Roc, en la avenida Torrenova de Magaluf. Al lugar acudieron varias dotaciones de emergencia, aunque no pudieron hacer nada ya por su vida.

La Policía Judicial de la Guardia Civil de Calvià se hizo cargo de la investigación. Los agentes identificaron al fallecido como Thomas Owen H., británico de 20 años. A partir de ahí los investigadores reconstruyeron las horas previas al siniestro, en un intento de dilucidar las circunstancias que rodearon la muerte del joven.

Thomas Owen había llegado a Mallorca el día anterior para pasar unos días de vacaciones junto a un amigo. Esa misma noche, recién llegados a la isla, salieron de fiesta. Los investigadores creen que Thomas Owen volvió a su alojamiento de madrugada y bajo los efectos del alcohol.

Y aquí se produjo la primera confusión fatal: el joven se equivocó de edificio. Estaba alojado en el edificio Florida, pero entró en el Edén Roc, situado muy cerca, en la misma acera.

Parece ser que el joven no se dio cuenta del error. Subió a una de las plantas superiores buscando su habitación, y recorrió un pasillo exterior que terminaba en una barandilla. Fue entonces cuando metió la segunda equivocación. Los investigadores creen que el joven pensaba que el pasillo continuaba al otro lado del murete y lo saltó, cayendo al vacío desde una altura de unos siete pisos, lo que le causó la muerte en el acto.

Se trata del tercer fallecido en circunstancias parecidas en Mallorca en los últimos meses. Un turista inglés de 22 años falleció el pasado 19 de marzo al caer de un quinto piso en la calle Aragón en Palma, donde estaba celebrando una fiesta con un grupo de amigos. Al parecer el joven cayó por el balcón sin que el resto del grupo se percatase de lo oocurrido.

Un mes después, el 27 de abril, una británica de 19 años falleció en Magaluf al caer desde un sexto piso de altura también en el edifico Edén Roc, donde se produjo el último siniestro. En este caso la joven no residía allí, sino que fue a casa de una amiga. Al encontrar la puerta cerrada trató de entrar por un lateral, pero cayó al vacío.