La dirección del colegio Sant Agustí de Palma ha expulsado a un portero del centro que ha sido denunciado por la familia de un niño de once años por someterle a tocamientos sexuales. Los hechos se habrían producido durante la grabación de un vídeo conmemorativo del 125 aniversario del centro, circunstancia que el sospechoso habría aprovechado para quedarse solo con el menor, algo que, según fuentes del colegio, está terminantemente prohibido. El hombre fue detenido por la Policía Nacional y quedó en libertad con cargos tras declarar.

Un portavoz del colegio explicó ayer que el detenido, un hombre de 32 años, no es profesor, sino que fue contratado como portero y que además realizaba actividades extraescolares, como monitor de baloncesto y catequista. Además es aficionado al cine y en la actualidad estaba realizando un vídeo conmemorativo por el 125 aniversario del colegio. En este vídeo aparecían diversas escenas cotidianas del centro y participaban tanto profesores como alumnos. Presuntamente se aprovechó de esta circunstancia para cometer los abusos sexuales sobre uno de estos alumnos, un niño de once años, al que habría sometido a tocamientos en tres ocasiones distintas durante un plazo de dos semanas. El menor le contó lo que le había ocurrido a sus padres, que inmediatamente informaron tanto al colegio como a la Policía.

Según el relato del portavoz, en el centro tuvieron conocimiento de la denuncia de los padres del niño el pasado día 23 a las nueve de la mañana. "Se aplicó de inmediato el protocolo previsto para estos casos", continuó. "Con entrevistas a los afectados y la apertura de actas, y a las diez y media de esa mañana se suspendió de funciones a ese señor y se le envió a casa".

Los padres presentaron denuncia ante la Policía ese mismo día. Los agentes de la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) le citaron en comisaría para el 28 de mayo y, cuando se presentó, quedó inmediatamente detenido. Fue puesto a disposición del juzgado de guardia y quedó en libertad con cargos, con una orden de alejamiento del menor. Los agentes realizaron también un registro en su domicilio y se intervinieron diverso material informático y vídeos que estaban pendientes de ser analizados.

Desde el colegio se indicó que habían mantenido desde el primer momento una actitud de máxima colaboración con la familia y la Policía, y de transparencia. Ese mismo día se informó de lo ocurrido a los miembros de la Asociación de Padres de Alumnos y para hoy se ha convocado una reunión para informar a todas las familias.

Desde el colegio se insiste en que han realizado una investigación interna y no tienen constancia de que haya más víctimas. Se trataría de un único niño, que habría sufrido los abusos en tres ocasiones distintas a lo largo de dos semanas. Estos abusos habrían consistido en tocamientos, sin que se tenga constancia de que el presunto agresor hubiera ido más allá.

También destacaron que durante el curso han invitado a miembros de RANA, la asociación que representa a víctimas de abusos sexuales, a realizar charlas para los niños, y también a la Policía. Estas medidas habrían permitido, segun el portavoz del centro, que el niño supiera lo que estaba pasando y lo denunciara enseguida.

El detenido trabajaba como portero del centro desde hace tres años, y había acreditado previamente que no tenía antecedentes por delitos sexuales. El hombre participaba en activades extraescolares, como monitor de baloncesto, y daba también catecismo. Los presuntos abusos, sin embargo, los habría cometido aprovechando que estaba realizando un vídeo conmemorativo del 125 aniversario del centro. Con la excusa de la grabación, se habría quedado a solas con el menor, algo que, según el centro, está terminantemente prohibido.