La Guardia Civil ha detenido por segunda vez en menos de una semana a Francisco González Lameiro, el propietario de la pirotecnia de Tui. Los agentes le atribuyen la presunta comisión de delitos de tenencia de explosivos y riesgo catastrófico. Su arresto está directamente vinculado al hallazgo este fin de semana de dos "naves bomba" que ocultaban unos 1.750 kilos de explosivos.

Su primer arresto fue el miércoles, el día de la explosión que causó dos muertos, una treintena de heridos y un sinfín de gravísimos daños materiales en viviendas de la parroquia de Paramos, donde se ubicaba la nave donde fue la fatal deflagración.

En cuanto a los nuevos hallazgos del fin de semana, en el primer galpón, a tan solo cien metros del taller de su negocio precintado en Baldráns, los artificieros del Tedax localizaron 600 kilos de explosivos, 475 kilos de pólvora y otros 120 de material de pirotecnia preparado para su distribución en el mercado. El segundo almacén ilegal se sitúa en un antiguo depósito de angulas en la zona de "Las Pólvoras" , también cerca.

En su interior se intervinieron 1.500 kilos de materia prima para la preparación de pólvora: azufre y nitrato de potasio, sobre todo, muy similar al que causó la catástrofe. Muy cerca del lugar, acordonado por la Guardia Civil durante toda la jornada, está el supermercado Alimentación Álvarez, situado en una zona de numerosas viviendas. Además, se incautaron de 11 kilos de productos terminados y preparados para ser disparados.