La Policía Nacional ha detenido a una persona de origen colombiano en Mallorca por presuntamente integrar una red dedicada a falsificar tarjetas de residencia de extranjeros. Los agentes han desarticulado la organización, asentada en Madrid, al arrestar a 12 sospechosos, seis de ellos en la capital española, cuatro en Barcelona, uno en la isla y otro en Pamplona. Todos son naturales de Colombia y están acusados de organización criminal, estafa, falsedad documental e infracción a la ley de extranjería.
La banda se había establecido en Madrid y los demandantes principales de la documentación falsa eran mujeres, también de nacionalidad colombiana, que ejercían la prostitución en Barcelona. Los falsificadores llegaban a cobrar de forma fraccionada 6.000 euros por cada tarjeta, tratándose de copias de gran calidad, según ha informado la Policía.
Las pesquisas se iniciaron cuando un agente detectó en un control de documentación una tarjeta de identidad de extranjero, que resultó ser una falsificación de excelente calidad. En esos momentos, se detuvo al ciudadano colombiano que llevaba la tarjeta por un delito de falsedad. A partir de ahí, se abrió una línea de investigación en busca de una red que se dedicaba a la fabricación de estas copias.
La Policía averiguó que una banda, ubicada en Madrid, captaba en España a extranjeros en situación irregular a los que prometían regularizar su situación administrativa en el país mediante la adquisición de una tarjeta de residencia falsificada.
Los falsificadores vinculaban trámites legales con la confección de la documentación falsa. Cuando la red reunía la información y material suficientes, elaboraba la copia de la tarjeta, que entregaba al destinatario a cambio de 6.000 euros.
La banda actuaba en Madrid, Coslada y Parla. También vendía las falsificaciones en Barcelona, sobre todo a mujeres colombianas que ejercían la prostitución y que eran captadas por la pareja del responsable de varios clubs de alterne de la ciudad condal.
La investigación policial culminó con el arresto de los doce sospechosos, uno de ellos en Mallorca, y el registro de tres domicilios en Madrid, Parla y Coslada, además de la inspección de dos locales de alterne en Barcelona.
