Versiones enfrentadas en el juicio celebrado ayer por la mañana en la Audiencia de Palma por los presuntos abusos sexuales a una menor de 16 años en su domicilio de Palma. La fiscal se ratificó en la petición inicial de nueve años de prisión para el procesado, al entender que no hubo consentimiento por parte de la víctima . Por el contrario, el abogado defensor pidió la absolución de su cliente al considerar que se trataba de relaciones sexuales consentidas.

Los hechos que se enjuiciaron ayer ocurrieron sobre las diez y media de la mañana del 5 de enero del año pasado en el domicilio de la menor en Palma. La víctima habría contactado por Instagram con el joven, de 18 años, para que acudiera a su casa. En ese momento se encontraba también el hermano pequeño de la chica, de 10 años. Fue allí donde se cometieron los presuntos abusos sexuales.

De acuerdo con la versión de la denunciante, ella contactó unos días antes con el presunto agresor a través de Instagram animada por una amiga "para ver si te echa la caña". La menor se prestó a ello y empezó a chatear en la red con él. Tras un intercambio de mensajes, el 5 de enero le invitó a que fuera a su casa. "No podía salir porque mi familia me quitó el móvil".

"Me bajó los pantalones y yo me los subía", indicó. "Me dijo que me iba a meter la mano y me metió el miembro", precisó. Durante su exposición, la denunciante insistió en que el procesado "sabía que no quería tener relaciones". También hizo especial hincapié en que ese día perdió su virginidad "y yo no quería".

Sin embargo, la propia denunciante reconoció durante su comparecencia que envió un mensaje en Instagram al procesado unos días después en el que afirmaba que quería volver a verle. Estas palabras fueron esgrimidas por la defensa para tratar de acreditar el supuesto consentimiento de la víctima.

Bloqueada en WhatsApp

El procesado, por su parte, afirmó en el transcurso de su alocución que se trataron de relaciones sexuales "consentidas". En este sentido, resaltó que, en las horas siguientes, ella le había mandado varios mensajes. Debido a que él tenía novia decidió bloquearla en WhatsApp y en Instagram.

La fiscal dotó en sus conclusiones definitivas de plena credibilidad al testimonio de la denunciante. Así abundó en la denuncia de esta en la que supuestamente le dijo "no quiero hacer nada fuera de lo normal.

Mientras, el abogado defensor del encausado solicitó la absolución de su cliente al considerar que sí hubo consentimiento y que la versión de la denunciante "carece de credibilidad". Asimismo, en caso de ser declarado culpable, instó a que no se le impusiera ninguna pena en aplicación del artículo 183 del Código Penal. El letrado abundó en la proximidad de edad de los dos y en la similar madurez y desarrollo de ambos. El procesado acababa de cumplir 18 años cuando ocurrieron los hechos.