"No pueden cambiar su nombre y su identidad en la documentación, o no tienen acceso a las hormonas o los bloqueantes o no tienen aceptación en el colegio y sufren acoso escolar". Estas son las tres principales motivaciones que llevan a un chico o a una chica transexual a desear y a intentar suicidarse. Así lo explica María Luisa, madre de una niña trans de diez años, y vocal en Balears de la Asociación de Familias de Menores Transexuales Chrysallis.

También se puede unir a estos factores de riesgo de suicidio el rechazo que sufren los transexuales dentro de su propia familia o el de uno de los progenitores. El apoyo familiar sustenta a muchos menores de este colectivo.

A nivel nacional tres transexuales se han suicidado en los últimos meses. Alan en Cataluña, Ekaiz en el País Vasco y Thais en Madrid. En estos tres casos, el suicidio también se considera relacionado con uno de estos tres factores de riesgo.

El acceso a las hormonas de una persona transexual está regulado por la Seguridad Social. No obstante, en cada comunidad autónoma varía la edad mínima a la que se puede tener acceso. "En Balears los menores no se pueden hormonar hasta los 16 años. Es una edad muy tardía en el que muchos chicos ya se han desarrollado", critica María Luisa.

Trato individualizado

La falta o el retraso en el acceso a las hormonas de un transexual puede desencadenar una crisis, que puede derivar en un intento de acabar con su vida. "Para un chico trans, que le salga el pecho o tener la regla puede ser un trauma tremendo y esto se puede evitar. Para esto están los bloqueantes. Si se espera a que se haya desarrollado, la única solución es pasar por el quirófano y operar", insiste esta madre de una niña trans, que manifestó su identidad femenina a los seis años.

María Luisa subraya la importancia que supone dar un trato individualizado a cada menor transexual y en la importancia que supone administrar los bloqueadores antes de que se manifiesten los síntomas de un sexo que no se corresponde con su identidad.

La Asociación de Familias de Menores Transexuales Chrysallis engloba a 30 padres en Balears. La niña trans más pequeña es de cuatro años y el mayor, ya adulto, tiene 19 años.