No era lo que se dice un ladrón discreto. Una patrulla de la Policía Local de Palma arrestó en la madrugada del pasado martes a un ladrón que acababa de forzar las puertas de dos establecimientos contiguos de la calle Joan Miró y estaba tratando de colocar una caja registradora sobre una "scooter" para llevársela. Los agentes comprobaron posteriormente que la moto también era sustraída, por lo que le detuvieron por los robos en los locales y el hurto del vehículo.

Una patrulla de la Policía Local que circulaba sobre las cuatro menos veinte de la madrugada por la calle Joan Miró se topó con una escena que despertó sus sospechas. En una acera había una moto colocada en perpendicular, mientras que un hombre estaba tratando de colocar en equilibrio una caja registradora para llevársela. Los policías se detuvieron e interceptaron al sospechoso. Se percataron entonces de que el establecimiento comercial situado allí mismo tenía una luna rota y el acceso forzado. El local contiguo también tenía señaes de haber sido violentado.

Los agentes cachearon al presunto ladrón y le intervinieron un hacha, unos alicantes y unos guantes.

Ante los indicios de que había entrado a robar en los dos locales, el hombre fue detenido. Se trata de F.F.B., español de 54 años.

Los policías se percataron también de que el scooter en el que circulaba estaba de baja temporal porque había sido denunciado como sustraído.

El hombre fue arrestado como presunto autor de los delitos de robo con fuerza y robo de vehículo a motor.