El dueño de tres perros de raza pitbull que escaparon de su finca en Santa Maria y mataron a otro can, un gato y una oveja ha sido condenado hoy a seis meses de prisión. En el juicio, el acusado ha admitido los hechos, se ha declarado autor de un delito de maltrato grave a animales domésticos y ha aceptado indemnizar con un total de 450 euros a los perjudicados. Además, no podrá ejercer ninguna profesión relacionada con la tenencia o el comercio de animales durante dos años.
Los hechos ocurrieron el 20 de julio de 2016. El hombre, de 31 años, tenía tres perros -dos machos y una hembra- de raza pitbull en una finca situada en Santa Maria. Los animales, considerados potencialmente peligrosos, no estaban debidamente vigilados y consiguieron escapar del inmueble.
Los perros camparon a sus anchar durante todo el día. A mediodía se colaron en dos fincas de la calle Camada del Terme, a las afueras del municipio, cerca de la carretera que lleva a Consell. En una de ellas mataron a un gato de tres meses y en la otra acabaron con la vida de otro perro, que recibió una dentellada en el cuello. Horas después, sobre las cinco y media de la tarde, dos de los perros pitbull se adentraron en otra finca del polígono de Son Llaut. Allí mataron a una oveja.
Los tres perros pitbull acabaron siendo capturados y la Guardia Civil identificó a su propietario. La fiscalía imputó al hombre un delito de maltrato grave a animales domésticos, al entender que no había custodiado debidamente a sus animales para evitar que escaparan de la finca y atacaran. El ministerio público reclamó inicialmente un año de prisión para el procesado, tres de inhabilitación para trabajar con animales y 1.360 euros de indemnización para los dueños del perro, el gato y la oveja fallecidos.
La fiscal y el abogado defensor alcanzaron ayer un acuerdo de conformidad que rebajó estas penas. El procesado aceptó seis meses de cárcel y dos de inhabilitación, e indemnizará con 300 euros al dueño del perro, otros tantos al del gato y 60 al de la oveja.
