La fiscal solicitó ayer en la Audiencia de Palma que se investigue a una joven víctima por mentir en el juicio de inducción a la prostitución en el que está acusada su madre. El ministerio público pidió en el trámite de informes ante la sección segunda que se deduzca testimonio a la testigo, de 18 años, por incurrir en un delito de falso testimonio por haber mentido en la vista oral.

La joven aseguró el lunes ante la sala que todas las acusaciones contra su madre en las que la incriminaba por haberle propuesto tener sexo con un hombre mayor a cambio de dinero a finales de 2015 en Palma se las había inventado porque estaba enfadada con ella. "Todo eso me lo inventé. Yo estaba muy enfadada con la vida, sufrí una violación, culpaba a mi madre de todo y empecé a mentir. Llegó un punto en que quería hacerle daño", indicó la muchacha el primer día de juicio.

La fiscal recalcó ayer que la joven "nos ha mentido claramente" durante la vista oral. Por ello, solicitó que sea investigada por falso testimonio. Además, mantuvo su petición de pena inicial de diez años de prisión para la progenitora, de 41 años, por un delito de inducción a la prostitución de un menor de 16 años. También solicitó una multa, ocho años de libertad vigilada, ocho años de alejamiento de su hija y una indemnización de 5.000 euros por los daños morales ocasionados.

Por su parte, la acusación particular, en representación del Institut Mallorquí d'Afers Socials (IMAS), pidió una condena de cinco años de cárcel por inducción a la prostitución a una persona mayor de 16 años, ya que en la fecha en la que supuestamente ocurrieron los hechos la menor contaba 16 años. Mientras, el abogado defensor reclamó la libre absolución de su representada al considerar que no hay prueba de cargo suficiente, ya que no ha quedado acreditado quién es el hombre con el que la menor habría tenido sexo ni tampoco su edad. "El relato de la joven no es coherente ni verosímil", manifestó el letrado.

En cambio, las acusaciones argumentan que el testimonio inicial de la víctima cumple con los criterios de verosimilitud. "No era un discurso aprendido, hizo un relato muy preciso, el estrés postraumático que presentaba es por la situación de violencia sexual a la que fue sometida la menor", destacó la fiscal. "La menor se siente culpable por acceder a la petición de su madre de tener sexo con un hombre mayor a cambio de dinero", dijo la fiscal.