Un acusado ha aceptado hoy en la Audiencia de Palma una condena de seis años de prisión por grabar con una cámara oculta en el baño de casa en Sencelles a su hija, su hijastra, su sobrina y a dos amigas de su hija, todas ellas menores de edad, cuando se cambiaban entre 2005 y 2015.

El sospechoso, que está encarcelado, obtenía gran cantidad de imágenes de las niñas y adolescentes desnudas, sin que ellas lo supieran, y luego las compartía a través de Internet con otros internautas.

El hombre, que se enfrentaba a 17 años de cárcel, se ha declarado hoy autor de un delito de corrupción de menores, otro de descubrimiento y revelación de secretos y otro de abuso sexual. Además de los seis años de prisión, se ha conformado con una indemnización de 25.000 euros a cuatro perjudicadas. Fiscalía, acusación particular y defensa han alcanzado hoy un acuerdo ante el tribunal de la sección segunda.

El procesado, entre 2010 y 2015, también abusó sexualmente de una de las víctimas, su sobrina, cuando ambos se bañaban en la piscina del domicilio en Sencelles. El hombre la manoseaba y la sometía a tocamientos íntimos por encima del bañador con el pretexto de jugar con ella en el agua. En esa época la perjudicada tenía entre 14 y 19 años.

El encausado también disponía de multitud de archivos pedófilos en su equipo informático. Los agentes le intervinieron en su ordenador, un pendrive y en su cámara de grabación gran cantidad de imágenes de pornografía infantil en las que aparecían menores desnudas con un claro contenido sexual. Según la fiscalía, el hombre se había descargado este material en su ordenador por Internet y, a la vez, transmitía y difundía estas imágenes a otros usuarios a través de la Red.