Natalia Rodríguez, Natalia Rodríguezla madre de Malén Ortiz, se ha erigido en la voz en Balears de las personas de las que se desconoce por completo su paradero. De hecho, es la coordinadora de SOS Desaparecidos en Balears. Su principal preocupación pasa por dar visibilidad a la docena de personas de las islas, aproximadamente, de las que no se tiene constancia de dónde se encuentran.

En concreto, la madre de Malén y la asociación SOS Desaparecidos a la que pertenece propugnan "un protocolo consensuado de todas las fuerzas de seguridad" para que la respuesta ante un nuevo caso de desaparición sea mucho más efectiva y coordinada.

De hecho, una de sus principales reivindicaciones es que se dote de una mayor cantidad de medios a Policía Nacional y a Guardia Civil para la búsqueda de personas. "Creemos que debería crearse grupos especializados en desapariciones".

Natalia Rodríguez insiste en que el problema de las desapariciones no pasa solo por la coordinación sino por una toma de conciencia de la gravedad que supone este problema. "Hace falta una mayor sensibilización social", subraya.

La madre de Malén es plenamente consciente de la espectacular repercusión que tuvo en la sociedad mallorquina la desaparición de su hija. La otra cara de la moneda la suponen los casos que pasan casi completamente desapercibidos y el rastro de la persona se difumina con una mayor facilidad.

Sus protestas en la pinada de Santa Ponça en los últimos cuatro años se centraron en reclamar noticias sobre el paradero de su hija Malén. Aunque en los últimos años las movilizaciones las hizo extensivas a todas las personas de las que se desconoce por completo su paradero.

Frente a la docena de personas de las que se desconoce su paradero en Balears, las cifras a nivel nacional son mucho más inquietantes. Unas 10.000 personas desaparecen en España cada año. Aunque la inmensa mayoría es encontrada a los pocos días, hay un porcentaje, cifrado en torno al 8%, de los que no se vuelve a saber nada.

"Un escándalo"

Un dato muy significativo es que un gran número de personas de las que no se vuelve a tener noticias son menores. Algo que, a juicio de la madre de Malén Ortiz, constituye "un escándalo".

En marzo del año pasado se reunieron en el Ministerio del Interior cuatro asociaciones que trabajan con la búsqueda de personas a las que se perdió el rastro -SOS Desaparecidos, Inter SOS, QSD Global y Fundación Anar- con el ministro Juan Ignacio Zoido.

El perfil medio de la persona desaparecida en España es de más de 35 años y, fundamentalmente, se trata de hombres. No obstante, hay un dato especialmente preocupante de Balears que le emparienta con Madrid, Barcelona, Las Palmas, Málaga y Murcia: el elevado número de casos de alto riesgo de las que se desconoce su paradero. A estas cifras hay que sumar la angustia permanente en los familiares ante la ausencia de los seres queridos.