Un acusado aceptó ayer en la Audiencia de Palma una condena de tres años y medio de prisión por agredir sexualmente a una mujer y abusar de otra en una zona apartada de Santa Ponça, en Calvià, en el verano de 2014 con apenas unos días de diferencia. El sospechoso, un español, se dirigía de madrugada a la calle Ramón de Moncada, a un lugar poco concurrido, donde esperaba a las víctimas, que a esas horas regresaban a sus respectivos domicilios. Allí, las sorprendía y las asaltaba.

El encausado ayer se declaró autor de un delito de agresión sexual y otro de abuso sexual ante el tribunal de la sección segunda. Inicialmente, se enfrentaba a una petición de condena de 12 años de cárcel. Las partes alcanzaron un pacto y el hombre finalmente se conformó con tres años y medio de prisión. La sala apreció la circunstancia atenuante de reparación del daño, ya que se ha consignado la indemnización de 13.450 euros por las lesiones y los daños morales causados a las dos perjudicadas.

El agresor sexual primero actuó el pasado 29 de junio de 2014, sobre las cuatro de la mañana, cuando acudió a una zona apartada de Santa Ponça con la intención de asaltar a las mujeres que pasaran por allí. En la calle Ramón de Moncada, vio a una extranjera que llegaba a su domicilio. Cuando la mujer metía la llave para entrar en su apartamento, se aproximó a ella, la empujó contra la pared, le metió la mano dentro del pantalón y la tocó en sus zonas íntimas, forzándola, pese a que ella le dijo que parase. Luego, la víctima gritó y le empujó, cuando este le mostró sus genitales.

Al día siguiente, siguió a otra mujer, amiga de la primera, en la misma zona, pero esta pidió ayuda a unos conocidos y él escapó.

El 6 de julio de 2014, asaltó a otra perjudicada en la misma calle, a la que agarró de la muñeca y le tocó los pechos. La víctima logró soltarse y entrar en su casa.