Un hombre fue condenado ayer por haber entregado 2,5 gramos de heroína a un interno de la cárcel de Palma. El acusado reconoció los hechos y aceptó una pena de reducción a dieciocho meses de prisión y 560 euros de multa.

El imputado se trasladó el 16 de abril de 2016 hasta el centro penitenciario de Palma y entregó en la ventanilla destinada para la recepción de paquetes para los internos, un pantalón en el que escondía bajo la etiqueta una sustancia que una vez analizada resultó tratarse de 2,587 gramos de heroína.

El procesado no irá a prisión si no comete durante un periodo de dos años ningún delito penal. En el juicio ayer el Ministerio Fiscal aceptó la suspensión provisional de la pena. El inculpado sufre adicción a la heroína y dependencia a bebidas alcohólicas, pero "si continúa su tratamiento y controla esa dependencia hay probabilidad de que se recupere", dijo la fiscal.