La familia de Lucia Vivar, la niña de 3 años que fue hallada muerta en la vía férrea que une Álora y Málaga el pasado 28 de julio, sigue sin creer en la hipótesis de la muerte accidental. Así lo ha corroborado esta mañana la abogada de la familia, Ana Belén Ordóñez, en una rueda de prensa convocada esta mañana en Alhaurín el Grande, donde ha estado acompañado del abuelo de Lucía, Francisco Vicario.

La familia, así se ha detallado, ha contado en las últimas semanas con el trabajo de diversos criminólogos con el fin de esclarecer los hechos. Por parte de estos profesionales se han emitido informes diversos que cuestionan y ponen en duda la hipótesis oficial que defiende la Guardia Civil, basada en que Lucía fue embestida de manera fortuita por el tren.

"La niña no pudo hacer el recorrido sola", ha defendido la abogada de la familia, asegurando que los informes, que ya han sido aportados al Juzgado de Instrucción, "buscan siempre alcanzar la verdad". Según ha añadido Ordóñez, a día de hoy, y a falta de recibir el atestado definitivo, la familia de Lucía entiende que existen dudas más que razonables de que la pequeña, de tres años, haya podido realizar un trayecto de más de cuatro kilómetros en solitario y atravesando las vías del tren".

Según lo explicado, la familia echa en falta que se le facilite informes que consideran fundamentales para alcanzar una conclusión definitiva, entre otros, el informe sobre la inspección ocular realizado por parte de la Guardia Civil. En este sentido, Ordóñez ha lamentado que, "apenas tres horas después de lo ocurrido ya había una hipótesis prácticamente cerrada sobre los hechos".

Para avanzar en el esclarecimiento de los hechos, la familia de Lucía pide una reconstrucción de los hechos y solicita que asista la propia juez. Esta reconstrucción, según ha precisado Ordóñez, se tendría que realizar con una niña de la misma edad y fisionomía de Lucía. "Sabemos que es complicado que nos la otorguen, pero entendemos que serviría para constatar las dudas", ha finalizado Ordóñez, resaltando que, a pesar de todo, "la familia de Lucía ha mantenido y mantiene en todo momento prudencia y respeto a la investigación".