Un Porsche Cayenne negro sembró el pánico ayer de madrugada en la autovía de Andratx. El vehículo circulaba a gran velocidad hacia la localidad de Ponent mientras ocupaba los carriles en sentido Palma. La Guardia Civil detuvo poco después al hombre que iba al volante por conducción temeraria y por circular bajo los efectos del alcohol, ya que triplicaba la tasa máxima de alcohol permitida.

El incidente tuvo lugar sobre las tres menos cuatro de la madrugada de ayer. De repente, la central de emergencias del 112 empezó a recibir numerosas llamadas coincidentes. Los automovilistas alertaban de que un todoterreno negro circulaba en sentido contrario y a gran velocidad en la MA-1, la autovía de Andratx.

Un dispositivo especial se estableció en dicha vía rápida para interceptar el vehículo antes de que causara un accidente con fatales consecuencias. En concreto, el todoterreno había sido avistado a la altura del kilómetro 11 de la autovía de Andratx. El turismo tomó el sentido hacia esta localidad, pero ocupando los carriles de los que circulaban hacia Palma.

Ante el peligro de colisión inminente que representaba el todoterreno kamikaze en la autovía, todas las unidades disponibles de la Agrupación de Tráfico y de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil fueron movilizadas para tratar de interceptar al vehículo.

En primer lugar, los efectivos del Instituto Armado tenían que localizar con exactitud la posición del todoterreno negro. Para ello, en colaboración con el Centro de Gestión de la Jefatura Provincial de Tráfico de Balears, requirieron el sistema de vigilancia de las cámaras para que les indicara dónde se encontraba en esos momentos el vehículo.

Por fortuna, en los momentos en los que el turismo se había adentrado en sentido contrario en la autovía de Andratx el tráfico era muy escaso y, por tanto, el riesgo de colisión era menor. No obstante, la envergadura del todoterreno y la elevada velocidad a la que circulaba hacían temer a los agentes que cualquier posible siniestro tendría gravísimas consecuencias.

Las imágenes captadas por las cámaras de Tráfico mostraban al vehículo a gran velocidad. De repente, en el kilómetro 17,200 el conductor realizó un cambio de sentido de alto riesgo en un tramo curvo con escasa visibilidad. Al dar la vuelta, siguió en sentido correcto.

Finalmente, una patrulla de la Guardia Civil lo interceptó en la salida de Palmanova. Se trataba de un Porsche Cayenne, de matrícula alemana, conducido por A.B., alemán de 36 años. Fue detenido por conducción temeraria y por triplicar la tasa máxima de alcohol permitida.