Golpe al tráfico de drogas en el corazón de Punta Ballena. Al menos 14 personas, en su inmensa mayoría británicas, fueron detenidas ayer por tráfico de droga en el epicentro de Magaluf y con conexiones en Palma. Unos tres kilos y medio de cocaína, medio kilo de éxtasis y 123.000 euros fueron intervenidos en el transcurso de la redada.

Investigadores del Equipo de Crimen Organizado (ECO) y de la Policía Judicial de Algaida de la Guardia Civil iniciaron las pesquisas en torno al tráfico de droga en el principal núcleo del turismo británico más desenfrenado de Calvià y activaron la 'Operación Tatum'.

Después de numerosas gestiones consiguieron averiguar el domicilio de los traficantes que ponían la droga a la venta en Punta Ballena aprovechando la masiva afluencia de público ávido de fiesta, que llenaba los locales de la zona.

En la mañana de ayer se activó la fase de explotación. El helicóptero del Instituto Armado, 'el cuco', sobrevoló la zona. A continuación, efectivos del Grupo de Reserva de Seguridad (GRS), la unidad de élite de la Guardia Civil venidos expresamente desde Valencia, se desplegaron por los inmuebles donde se practicaron las detenciones. También colaboraron en la irrupción en los domicilios agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic). Mientras, los guías caninos de la Unidad Cinológica llevaron a sus perros adiestrados a escudriñar todos los rincones en busca de droga.

Uno de los hechos más significativos es que buena parte de la redada tuvo lugar en la misma Punta Ballena. Otros presuntos traficantes de droga se encontraban en un domicilio de la calle Llevant, situada a escasos metros.

Escasos transeúntes

Los escasos transeúntes que deambulaban ayer, a primera hora de la mañana, por la calle más concurrida de Magaluf, apenas repararon en la presencia de agentes de la Guardia Civil con el rostro cubierto con pasamontañas. El destino común de estos peatones eran los supermercados de la zona donde comprar agua para sobrellevar la resaca.

Algunos agentes trasladaron a uno de los detenidos hasta unos apartamentos en la calle Martí Ros Garcia para proceder al registro de este inmueble.

El mayor alijo de droga de la jornada se encontraba en el maletero de un coche estacionado en un garaje de la calle Reina María Cristina de Palma. Los efectivos del Instituto Armado detuvieron al titular del vehículo en un domicilio de la calle Aragó y le trasladaron al lugar donde estaba su turismo. En el interior del mismo encontraron dos kilos de cocaína.

Los registros en la capital balear se extendieron a la calle Llull de La Vileta y a un domicilió de la calle Francesc Sancho.

Además de esta sustancia estupefaciente, en otros domicilios hallaron medio kilo de pastillas de éxtasis y determinadas cantidades de hachís. También intervinieron en las viviendas balanzas de precisión y otros elementos que acreditaban que los moradores se dedicaban al tráfico de drogas.

De acuerdo con los investigadores, estos pisos cumplían la función de almacenes o 'guarderías' de la sustancia estupefaciente. El punto de venta preferente era Punta Ballena

La antesala de la 'Operación Tatum' había sido la 'Operación Dajú', desarrollada el año pasado en este mismo enclave. Entonces se detuvo a varios narcotraficantes, en su mayoría británicos, que vendían droga a los asistentes a los locales de Punta Ballena. La sustancia estupefaciente se la vendían falsos tiqueteros, que usaban ese trabajo como tapadera. La droga había llegado a Mallorca a bordo de pequeñas embarcaciones recreativas.