Un grupo de turistas alemanes no pudieron permanecer impasibles al presenciar una agresión de violencia machista ante sus ojos en la Playa de Palma. Un joven germano propinó un fuerte puñetazo en el rostro a su novia, ambos de 27 años y de la misma nacionalidad, que le hizo sangrar. Los testigos se echaron encima del agresor y lo redujeron hasta que agentes de la Policía Local acudieron al lugar y detuvieron al atacante por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar.
El caso de violencia machista tuvo lugar sobre las 0.40 horas del domingo en plena vía pública. En concreto a la altura del Balneario cinco de la Playa de Palma. Una pareja alemana empezó a discutir acaloradamente. En un momento dado, el sujeto quiso zanjar la disputa abruptamente. Le propinó a la joven dos fuertes puñetazos en la cara. Uno de los impactos le alcanzó una ceja por la que empezó a sangrar abundantemente. El segundo golpe le dio en el pómulo.
En ese momento, un grupo de turistas alemanes acertó a pasar por el lugar. En primera instancia, los germanos recriminaron su comportamiento al compatriota. A continuación, los testigos se dieron cuenta de que tenían que actuar de inmediato para impedir que prosiguieran los golpes sobre la víctima.
Los concienciados turistas con este tipo de delitos se abalanzaron sobre el atacante para tratar que depusiera su actitud. Los visitantes cayeron sobre el agresor y lograron reducirle, pese a que opuso una violenta resistencia. Mientras le sujetaban, los testigos avisaron a los servicios de emergencia.
Efectivos del Grup d'Acció Preventiva (GAP) de la Policía Local de Palma, que se encontraban de patrulla nocturna, acudieron con celeridad ante la llamada de emergencia.
Los policías preguntaron a los turistas germanos para que les explicaran lo que había ocurrido. Asimismo, los agentes preguntaron a otros testigos de la agresión para tratar de reconstruir cómo esta se había producido. Los numerosos testimonios coincidentes recabados, el rostro sangrante de la víctima y el comportamiento aún violento del agresor fueron suficientemente explícitos para averiguar con detalle lo que había ocurrido.
Felicitación policial
Acto seguido, los policías felicitaron efusivamente a los turistas alemanes, en particular a Manuel, por su activa colaboración para impedir un caso de malos tratos a una mujer. El oficial del GAP de la Policía Local estrechó la mano del visitante y rescatador y ambos no dudaron en inmortalizar el instante en una fotografía. La imagen fue colgada por los agentes en las redes sociales -Facebook y Twitter- para expresarles públicamente su agradecimiento.
Las asistencias sanitarias del Ib-salut también se personaron en la Playa de Palma para atender a los heridos. Por un lado, la joven alemana agredida fue trasladada al hospital Son Llàtzer para curarle las heridas que tenía en el rostro. Los puñetazos propinados por su compañero le provocaron una gran brecha. Los facultativos le tuvieron que aplicar varios puntos de sutura.
Mientras, el presunto agresor fue conducido a la Unidad de Detenidos del hospital Son Espases para ser tratado de las lesiones que presentaba, después de que los rescatadores de la joven se abalanzaran sobre él para impedir que prosiguiera propinando puñetazos a la víctima. Una vez que el personal sanitario había tratado sus heridas, fue conducido a los calabozos del cuartel de Sant Ferran. La víctima se negó a denunciar el ataque.
