La parroquia de Son Dameto acogió ayer un multitudinario funeral por la muerte de la niña de 13 años, alumna del colegio Madre Alberta, y que falleció después de que fuera arrollada por un taxi cuando realizaba una actividad de orientación cuando se encontraba en las inmediaciones del centro escolar. El fallecimiento produjo una profunda consternación en el colegio después de que estuviera un mes en estado crítico en la UCI de Son Espases. Los padres de la menor pidieron que los donativos fueran destinados a proyectos relacionados con la infancia.