La Guardia Civil busca en un pozo el cuchillo utilizado por el asesino de Sencelles. Agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) del instituto armado inspeccionan esta mañana un depósito situado en la finca donde apareció el cadáver para tratar de encontrar el arma del crimen, una prueba que podría resultar clave para identificar al asesino y resolver el caso. Los investigadores sospechan que la persona que mató a Juan Antonio Florit, de 57 años, podría haber arrojado el cuchillo a este pozo para intentar deshacerse de él y dificultar la labor de la Guardia Civil.

Mientras tanto, los agentes del Laboratorio de Criminalística siguen recogiendo muestras en la escena del crimen,recogiendo muestras en la escena del crimen en busca de cualquier rastro que pueda ayudar a aclarar los hechos. En la vivienda se han encontrado muchos indicios que deberán ser analizados en los próximos días. El grupo de Homicidios, por su parte, está tomando declaración a numerosas personas para tratar de reconstruir las últimas horas de vida de la víctima y aclarar si mantenía alguna enemistad. Los investigadores trabajan también con la hipótesis del robo, esto es que Florit sorprendiera a alguien robando en la finca y se iniciara una violenta pelea.

El cadáver de Juan Antonio Florit fue hallado el lunes por la noche por un familiar en una finca del camino de Son Creixell, a las afueras de la localidad. El cuerpo tenía numerosas heridas de arma blanca y golpes, así como lesiones defensivas que apuntan a un intenso enfrentamiento entre el asesino y la víctima.