La Audiencia de Palma ha condenado hoy a cinco años de prisión a un hombre de origen moldavo por intentar matar a su tía estrangulándola y clavándole un cuchillo en el cuello cuando esta no le permitió alojarse en su casa en el barrio de Camp Redó, en la ciudad, en marzo de 2016. El sospechoso, de 36 años y que actualmente está encarcelado, ha confesado los hechos ante el tribunal de la sección primera. Se ha declarado responsable de un delito de homicidio en grado de tentativa.

La fiscal ha rebajado su petición de pena de siete años de cárcel a cinco y el acusado se ha mostrado conforme. "Sí reconozco los hechos. Fui a casa de mi familia a pedir auxilio. Yo estaba drogado, no me acuerdo de nada, no tenía intención de clavar un cuchillo en el cuello a mi tía", ha indicado ante la sala.

La presidenta del tribunal ha dictado sentencia 'in voce' contra el hombre por homicidio en grado de tentativa. Además de los cinco años de prisión, le ha impuesto la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros de la víctima y de comunicarse con ella por un periodo de diez años. El agresor se ha mostrado muy agradecido a la sala al final de la vista oral. "Muchas gracias por su atención y lo que han hecho por mí. Buenos días, que tengan todas un muy buen día", ha insistido el ciudadano moldavo, antes de regresar al calabozo. El fallo ya es firme.

Los hechos se remontan al pasado 6 de marzo de 2016, sobre las ocho de la tarde, cuando el acusado se personó en el domicilio de una prima de su madre situado en la zona de Camp Redó, en Palma. El hombre le pidió de forma repetida que le permitiese alojar en su casa, pero la familiar le dijo que le resultaba imposible debido a la falta de espacio, ya que en la vivienda también residían su madre, de 83 años, su hija, la pareja de esta, y un hermano.

Entonces, el sospechoso reaccionó de manera agresiva insistiendo en que le dejara quedarse a vivir en su casa y agarró a la víctima del cuello tratando de estrangularla. Al mismo tiempo, con la otra mano le clavó en el cuello un cuchillo fabricado artesanalmente de 20 centímetros de hoja. En esos instantes, intervinieron otros moradores y se abalanzaron sobre el agresor hasta lograr desarmarlo.

Como consecuencia del ataque sufrido, la perjudicada padeció un traumatismo laríngeo debido al intento de estrangulación, así como una herida incisa por arma blanca. Tuvo que ser hospitalizada y le ha quedado como secuela una marca en el cuello que ocasiona un perjuicio estético ligero.