La policía judicial de la Guardia Civil ha detenido en Eivissa a una pareja formada por un hombre y una mujer de nacionalidad francesa que estaban reclamados por la justicia de su país en relación con el hallazgo de una anciana quemada y descuartizada en un bosque cercano a la localidad gala de Pau. Ella es hija de la fallecida y él, su yerno, y ambos tienen unos 50 años de edad. Previamente, la policía francesa detuvo a dos hijos de la pareja, nietos de la fallecida, y a una tercera persona. Tras el hallazgo del cadáver y la realización de la autopsia se descubrió que, antes de ser quemada, la mujer había estado congelada.

A esta pareja, que vivía en el barrio de la Marina pero no estaba empadronada ni existía constancia documental de su presencia en la isla, puesto que no trabajaban, se le atribuye la presunta comisión de un delito de estafa, ya que, al parecer, estaban cobrando la pensión de la mujer fallecida, si bien la investigación permanece abierta y, por el momento, no se descarta la comisión de otros delitos.En diciembre del año pasado, la gendarmería de la ciudad de Pau, capital del departamento de Pirineos Atlánticos, remitió una comisión rogatoria a la Fiscalía de Eivissa en la que pedía la búsqueda, detención y extradición de esta pareja.