La fiscalía solicita dos años y medio de prisión para un hombre acusado de herir a tres policías al ser detenido por un caso de violencia machista en Palma. El sospechoso, que acabó absuelto por los malos tratos, habría atacado a los agentes porque no quería ser esposado. Golpeó a los funcionarios, propinándoles puñetazos y empujones, y acabaron cayendo al suelo. Uno de los perjudicados tardó más de cuatro meses en recuperarse de las lesiones sufridas y el ministerio público reclama para él casi 5.000 euros de indemnización. El juicio por estos hechos se celebrará en las próximas semanas en un juzgado de lo penal de la ciudad.

El 23 de mayo de 2015, la Policía Local de Palma fue alertada de un posible episodio de violencia machista en un piso del barrio de Son Roca. Tres agentes acudieron de inmediato al lugar y se entrevistaron con la pareja que residía en la vivienda indicada. Los policías apreciaron indicios de que el hombre había maltratado a su compañera y le anunciaron que quedaba detenido.

El sospechoso no se resistió inicialmente a su arresto, pero se opuso a que le pusieran las esposas en el interior de la vivienda. El hombre anunció a los policías que rodarían todos por los suelos si lo engrilletaban. Y así fue. El acusado, según el relato de la fiscalía, propinó un puñetazo en el ojo a uno de los agentes y arremetió contra los otros dos. Todos acabaron cayendo al suelo.

Los tres policías resultaron heridos a consecuencia de la agresión. Uno sufrió una contusión en la zona preorbitaria del ojo derecho, dolor en el hombro y golpes y erosiones en un brazo y una rodilla. Fue atendido en un centro médico, precisó un tratamiento rehabilitador y tardó 123 días en recuperarse. Otro de los agentes padeció contusiones en las rodillas y los brazos, de las que sanó en tres días, y el tercer policía sufrió dermoabrasiones en un brazo y dolor en un dedo de la mano izquierda y el tríceps, de las que se recuperó en una semana.

El acusado fue finalmente absuelto del delito de malos tratos, al no quedar probado que agrediera su compañera sentimental. Pero fue procesado por la agresión a los tres policías que lo arrestaron tras la llamada de varios vecinos del edificio.

La fiscalía le imputa delitos de atentado a agentes de la autoridad y lesiones, por los que reclama penas que suman dos años y medio de prisión. El ministerio público pide también que indemnice a dos de los agentes con 4.920 y 280 euros respectivamente por las heridas que les causó. El tercero ha renunciado a ser indemnizado.

El juicio por estos hechos debía celebrarse hace unas semanas en un juzgado de lo penal de Palma, pero el acusado no pudo acudir y las partes acordaron aplazar la vista.