Los numerosos restos humanos encontrados el sábado por unos niños en Son Flo, junto a Son Moix, podrían haber viajado hasta allí entre la tierra tras unas obras junto al Hospital General en el año 2012. La Policía Nacional ha abierto una investigación para conocer la procedencia de los huesos y esta hipótesis es la que cobra hasta el momento una mayor fuerza.

Unas obras en una finca de la calle Oms de Palma, en octubre del año 2012, sacaron a relucir una serie de restos óseos. El inmueble, que albergaba anteriormente una tienda de muebles a la altura del número 45, estaba situado a escasa distancia del Hospital General. Las pesquisas apuntan a que los huesos podrían haber aparecido en Son Moix después de que la tierra y los escombros del solar fueran trasladados hasta allí.

Un grupo de niños, alevines del Club Santa Catalina, se encontraron los restos humanos mientras jugaban en el descampado. Los pequeños llegaron al lugar donde estaban sus padres portando un fémur, una tibia y restos de un maxilar. Se dio la circunstancia de que uno de los progenitores era dentista y pudo identificar, sin ningún género de dudas, su origen humano.

Numerosos efectivos de la Policía Local y la Policía Nacional se encargaron de recoger los restos humanos que habían aparecido en el descampado. De hecho, algunos padres ejercieron de guías para que pudieran localizar más fácilmente los huesos. El forense del juzgado de guardia también acudió al solar junto a Son Moix. El facultativo concluyó que las osamentas eran bastante antiguas y no se encontró ninguna señal que apuntara a una mano criminal.