Un acusado ha aceptado hoy en la Audiencia de Palma una pena de seis años de cárcel por dejar tuerto a un hombre de un puñetazo en la ciudad en enero de 2014. El sospechoso, de 31 años y natural de Bolivia, también se ha conformado con el pago de una indemnización de 15.000 euros por las graves lesiones que ocasionó al perjudicado, un compatriota de 45 años.

La víctima sufrió un estallido ocular del ojo derecho debido a uno de los golpes que recibió en el rostro. Tuvo que ser hospitalizada, intervenida en dos ocasiones y perdió la visión en ese ojo. Ahora, lleva una prótesis. Además, esa zona ya la tenía debilitada por dos trasplantes de córnea.

Los hechos ocurrieron sobre las once y cuarto de la noche del pasado 1 de enero de 2014 en la plaza García Orell de Palma, donde los dos compatriotas discutieron. El agresor propinó puñetazos en la cara al perjudicado y uno de ellos le causó gravísimas lesiones en un ojo. La disputa se originó porque el acusado bailaba con la novia de la víctima.

El perjudicado ha identificado hoy en el juicio al autor de los hechos. "Sí fue esta persona la que me golpeó. Él me pegó", ha manifestado ante el tribunal de la sección segunda. Por su parte, el agresor se ha declarado culpable y ha aceptado la pena mínima por un delito de lesiones graves, seis años de prisión.