La Audiencia de Palma ha condenado a un hombre a tres años y medio de prisión por hostigar a su expareja y tratar de matarla arrojándola por la ventana de su casa en Eivissa en el verano de 2013, hecho que fue impedido por los policías que intervinieron. El tribunal de la sección segunda considera al sospechoso, un ciudadano paraguayo de 35 años, autor responsable de un delito de homicidio intentado y otro de coacciones leves. La sala también le prohíbe aproximarse y comunicarse con la víctima por diez años.

El hombre mantuvo una relación sentimental de dos meses con la mujer, que cesó en el verano de 2013. Al no aceptar la ruptura, el sospechoso la acosaba, según denunció ella. El 17 de agosto la vio conversando con un hombre y él se mostró muy celoso. Al día siguiente, irrumpió en su casa y la cogió por la espalda y el cuello mientras caminaba hacia una ventana abierta. Hizo ademán de lanzarse al vacío con ella, pero los policías lo evitaron con rapidez.