Un voraz incendio calcinó ayer al mediodía una nave agrícola a las afueras de sa Pobla y quemó una máquina, así como los productos que allí se almacenaban. El fuego destruyó pienso y cereal que se hallaban en las dependencias agrícolas, que quedaron reducidas a un amasijo de hierros deformados por el efecto de las altas temperaturas registradas.

La Guardia Civil ha iniciado una investigación para aclarar las causas y las circunstancias en las que se produjo el siniestro.

Los hechos ocurrieron sobre las dos y media del mediodía en una nave agrícola ubicada en una finca, en una zona de campo en la carretera de sa Pobla a Pollença. Nada más tener constancia del incendio, los Bombers de Mallorca del parque de Inca y Alcúdia se dirigieron a toda prisa hacia sa Pobla. Cuando llegaron al lugar, las llamas ya se habían propagado con facilidad y consumían la estructura metálica del almacén agrícola.

El fuego quemó también los productos almacenados. Se trataba de cereales como maíz y también de otras materias primas para elaborar pienso. Las altas temperaturas que se registraron deformaron por completo la estructura de la nave y dificultaron las tareas de extinción. Una máquina también sufrió cuantiosos daños materiales, según informaron ayer fuentes de los bomberos.

Los especialistas trabajaron unas dos horas hasta lograr sofocar el siniestro. Así, pasadas las cuatro y media de la tarde, empezaron a retirarse a sus parques.

El incendio fue aparatoso y no hubo que lamentar ningún herido ni intoxicado. La nave agrícola en la que se declaró el fuego quedó muy afectada, completamente destruida. Según un apuntó un testigo, quedó inservible. Se trata de una estructura de unos treinta metros de longitud por diez metros de ancho. Tras apagar el siniestro, los bomberos continuaron en la zona refrescando las dependencias.