La Audiencia de Palma ha absuelto a un joven de un delito de agresión sexual en grado de tentativa y otro de robo con violencia a una mujer que paseaba de madrugada por el centro de la ciudad el 18 de febrero de 2012 al considerar que la coartada del sospechoso fue "sólida" y "potente", ya que alegó y probó que esa noche estuvo en una fiesta universitaria en el polígono de Son Castelló hasta las cinco de la mañana, y al dudar de la identificación de la víctima, quien no reparó por ejemplo en la perilla del muchacho o su acento argentino al quedar muy afectada e impresionada por lo ocurrido. El tribunal de la sección segunda da la razón al letrado defensor Gabriel de Juan Oliver, que pidió la absolución de su cliente. La sala destaca que la agresión se produjo en hora nocturna y en una calle poco iluminada y el reconocimiento fotográfico y en rueda de detenidos no se efectuó de forma inmediata, sino un mes después de los hechos. Por este motivo, los magistrados indican que la identificación que realizó la perjudicada del sospechoso tuvo que tratarse de una confusión o un error visual.
A la hora de la violación, tal como corroboraron varios testigos, el acusado se hallaba en la biofiesta carnaval en un local de Son Castelló alejado del centro de Palma. La víctima fue asaltada a las tres de la mañana cerca de la plaza del Temple. Un hombre la agarró del cuello, la tiró al suelo y trató de violarla. Le robó un bolso y un anillo.
