Cuatro personas aceptaron ayer pagar multas por agredir a un hombre, que sufrió un corte en la cara, durante una trifulca en un prostíbulo de Palma. Los acusados -una prostituta, la encargada del negocio y dos usuarios- admitieron los hechos durante el juicio y acataron indemnizar a la víctima, que precisó seis puntos de sutura, con 2.500 euros.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 31 de agosto de 2014 en un domicilio situado en la calle Aragón donde se ejerce la prostitución. La víctima había contratado los servicios sexuales de una mujer y cuando terminó el tiempo pactado le pidió prolongar las relaciones. La prostituta se negó y ambos se enzarzaron en una discusión.

Al escuchar el alboroto, la encargada del negocio acudió a la habitación en la que se encontraban y ambas mujeres trataron de echar al hombre de la vivienda, produciéndose un forcejeo. A la trifulca se sumaron entonces dos clientes del prostíbulo, que arremetieron también contra la víctima. Uno de ellos la agarró del brazo, mientras la madama la sujetó del cuello y empezó a arrastrarlo hacia la salida.

Durante el enfrentamiento, cuando el perjudicado trababa de escapar del domicilio, los dos clientes lo sujetaron y uno de ellos pidió a la prostituta que le trajera un cuchillo. La víctima sufrió entonces un corte en la cara.

El hombre acudió a un centro médico para ser atendido y fue derivado al hospital Son Espases. Los médicos le aplicaron seis puntos de sutura y comprobaron que presentaba contusiones por todo el cuerpo. Como secuela padece una cicatriz en la cara.

Los cuatro acusados admitieron ayer los hechos en un juzgado de lo penal de Palma, tras alcanzar un acuerdo con la fiscal y el abogado del perjudicado, que retiró otro cargo por el hurto de un teléfono móvil. Así, los procesados se declararon autores de un delito de lesiones con la atenuante de reparación del daño, ya que antes de la vista ya habían abonado 1.123 euros para indemnizar a la víctima.

Todos ellos deberán abonar multas de 720 euros por el delito y pagar al perjudicado otros 1.223 euros por las lesiones que le causaron y las secuelas que padece. Ante la conformidad de las partes, el magistrado dictó sentencia in voce.