Las principales instituciones de Baleares participaron ayer en distintos actos de protesta por el asesinato de Ada Graciela Benítez, la última víctima de la violencia de género en la comunidad. La mujer fue muerta a puñaladas el sábado en Eivissa por su pareja, que se suicidó. Ayer al mediodía la víctima fue recordada con varios minutos de silencio en las sedes del Consell,Delegación del Gobierno y Son Espases (en las fotos), o el Consolat de la Mar.