La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer la muerte de una mujer de unos 45 años cuyo cadáver fue hallado ayer por la tarde en su domicilio de Binissalem. El cuerpo no presentaba signos evidentes de violencia, pero debido a su avanzado estado de descomposición los agentes estaban a la espera de la autopsia para confirmar la causa del fallecimiento. Tampoco en la vivienda se encontraron indicios que apuntaran a la intervención de otras personas en la muerta.

Según explicaron fuentes policiales, el hallazgo se produjo hacia las seis de la tarde, cuando vecinos de la calle Guillem Martí i Coll alertaron del fuerte olor procedente de un domicilio, en el que había varios gatos y perros.

Al lugar acudió una patrulla de la Policía Local y agentes de la Guardia Civil. Los funcionarios hallaron en la vivienda el cadáver de su moradora, una mujer de unos 45 años fallecida hace varios días, según las primeras pesquisas.

El óbito fue comunicado al juzgado de guardia de Inca y un médico forense se desplazó al domicilio para examinar el cuerpo, sin apreciar signos evidentes de violencia. Los animales que había en la vivienda fueron retirados por empleados municipales.

La Policía Judicial de la Guardia Civil ha asumido la investigación sobre la muerte de la mujer.