Durante una persecución por la zona de s'Arenal de Palma, un ladrón acabó quitándose la ropa y se quedó en calzoncillos -de color amarillo- para meterse en el mar y evitar que los agentes de la Policía Local que le seguían pudieran cogerle. Llegó a nado hasta una boya situada a unos 300 metros de la costa y se paró a descansar al ver que los efectivos de la Local no continuaban con la persecución. Sin embargo, lo que el descuidero desconocía es que por allí había una lancha del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, los llamados Geas. Y que, con los prismáticos, los policías locales sí la habían visto. De inmediato, contactaron con la Benemérita y esta movilizó a los agentes de la embarcación.

El ladrón se dio cuenta de su mala suerte, aunque ya no tenía escapatoria y se quedó atrapado en la boya hasta que le subieron a la lancha y le llevaron a tierra, donde los efectivos de la Policía Local procedieron a su arresto. No obstante, solo le acusaron de un delito leve por hurto en grado de tentativa, ya que no se llevó al agua la mochila sustraída a unos turistas, por lo que finalmente le dejaron en libertad tras tomarle declaración.

El joven Sergio Y. Ll., vecino de s'Arenal, no olvidará su carrera por la playa después de hurtar la bolsa semiescondida por una pareja de italianos que iban a darse un chapuzón. Pensaba que nadie le había observado, pero allí estaban una residente de veraneo en la concurrida zona turística y un empleado de las hamacas, los dos testigos que declararon ante la Policía Local. Todo ocurrió sobre las 12,30 del mediodía del lunes muy cerca del torrente dels Jueus y los turistas recuperaron su mochila sin saber la persecución que había provocado.