Un conductor ebrio fue detenido ayer tras arrollar a dos menores que se encontraban en la acera junto a la playa de Can Pere Antoni. El sujeto fue arrestado tras dar 0,92 en la prueba de alcoholemia. Los dos niños, de 11 y 13 años, fueron trasladados con policontusiones en sendas ambulancias hasta Son Espases, uno de ellos en estado grave.

El accidente ocurrió sobre la una y cuarto de la tarde a la entrada de la playa de Can Pere Antoni hacia el Portitxol. El conductor de un turismo perdió el control del vehículo y arrolló a dos menores -un niño de 11 años y su hermana de 13- que se encontraban sentados en la acera. La valla impidió que el coche se adentrara aún más en la zona peatonal.

Un dispositivo especial de emergencia se activó de inmediato para atender a las víctimas. Las asistencias sanitarias se encargaron de los dos menores afectados por el atropello.

El personal sanitario del Ib-salut atendió al niño de 11 años de policontusiones y lo trasladó en una UVI móvil al área de Pediatría de Son Espases. Mientras, los facultativos de una empresa privada condujeron en ambulancia a su hermana hasta el hospital de referencia de Balears.

Agentes de la Policía Local de Palma acudieron rápidamente hasta el lugar del accidente y abrieron una investigación sobre las causas del siniestro.

Los policías constataron de inmediato que el conductor del turismo presentaba claros síntomas de embriaguez. Las sospechas se confirmaron una vez que le realizaron el test de alcoholemia. La prueba dio un resultado de 0,92 miligramos por litro de aire expirado, que cuadruplicaba el máximo permitido para ponerse al volante.

A continuación, el conductor fue detenido por conducir bajo los efectos del alcohol y un delito contra la seguridad vial por las lesiones a los menores.