La Audiencia de Palma ha condenado a seis años de prisión a un hombre de origen ucraniano por una violación múltiple a una joven, que fue encerrada en la habitación de un piso en la ciudad y luego fue agredida sexualmente por turnos por el sospechoso y otros tres varones a mediados de 2008. El imputado, de 38 años y que permanece encarcelado de forma preventiva por estos hechos desde el pasado 16 de mayo de 2015, confesó ayer los cargos ante el tribunal de la sección segunda.

El procesado se declaró culpable de un delito de agresión sexual y se conformó con la pena solicitada por el fiscal. En un principio, se enfrentaba a una petición de condena de 14 años de prisión. Durante la vista oral, aceptó una pena de seis años, además de una indemnización de 12.000 euros para la víctima. Una vez cumpla cuatro años en el centro penitenciario y obtenga el tercer grado, el violador será expulsado del territorio nacional durante un periodo de diez años.

Los hechos se remontan a la noche del pasado 24 de mayo de 2008, cuando el acusado se hallaba en un domicilio en los alrededores de la calle Aragón de Palma, en compañía de una mujer natural de Colombia y de otros tres hombres que no han podido ser identificados y que se encuentran fugados de la justicia.

La perjudicada y los varones se habían conocido en un salón de juegos recreativos de la ciudad y ella decidió acompañarles al piso.

Una vez en la vivienda, los cuatro hombres procedieron a encerrar a la mujer en una de las habitaciones de la casa y sujetaron la puerta para impedir que esta saliera.

Acto seguido, el procesado y cada uno de los tres varones fueron entrando por separado, uno detrás de otro, al dormitorio donde estaba la víctima para forzarla por turnos.

Así, el acusado quitó el pantalón a la joven a la fuerza, también su ropa interior y los zapatos, y luego la empujó con violencia y se colocó encima de ella. Finalmente, la penetró vaginalmente, como también hicieron sus otros tres acompañantes.

En la vivienda donde se produjo la violación múltiple esa noche había más personas. El único agresor sexual que ha podido ser identificado y ahora condenado utilizaba distintos nombres. Su ADN coincide con las muestras halladas en el cuerpo de la perjudicada. El hombre fue interceptado en dos ocasiones, una por la Guardia Civil en Llucmajor y otra por robo.