Un acusado de origen dominicano se conformó ayer en la Audiencia de Palma con una pena de tres años de prisión por un delito contra la salud pública por haber traído a la isla un paquete con más de 160 gramos de cocaína oculto en su ropa interior. El pasajero imputado, de 39 años, fue interceptado por la Guardia Civil el pasado 3 de diciembre de 2015 en la zona de llegadas del aeropuerto de Son Sant Joan, procedente de Barcelona, cuando llevaba un bulto sospechoso con forma de plátano que contenía la droga. El hombre transportaba los estupefacientes, valorados en 7.291 euros, para su posterior distribución entre terceras personas. Fue detenido y desde entonces permanece en prisión provisional.

Ayer aceptó tres años de cárcel y una multa de 7.300 euros, pero no estuvo de acuerdo en que se le sustituya la pena por su expulsión del país. La vista oral se celebró por esta cuestión. El fiscal pidió que fuera expulsado y la defensa se opuso alegando arraigo.