Un menor de cinco años de edad viajó ayer solo en autobús desde Ibiza hasta Santa Eulària después de que las puertas del autocar se cerraran cuando la madre y su otra hija iban a subir.

La Policía Local de Santa Eulària recibió ayer a las 13.20 horas una llamada de las taquillas del autobús de Santa Eulària alertando de que un menor había llegado sin acompañante y que nadie lo había recogido.

Los agentes se hicieron cargo del menor y localizaron a los familiares tras ponerse en contacto con su tío.

Según explicaron, el pequeño estaba en Vila con su madre y con su hermana para viajar hasta Santa Eulària. El menor subió, pero las puertas del autobús se cerraron justo antes de que entrara la madre con su hermana.

La madre, extranjera y sin conocimientos de castellano ni catalán, alzó la voz para que se parara el vehículo e incluso lo golpeó el autobús pero no consiguió que se detuviera, según relató ella misma.

Seguidamente alertó a unos familiares para que comunicaran el suceso a la Policía Nacional.