La Audiencia de Palma juzgará el próximo viernes a un joven por presuntos abusos sexuales a su primo cuando el menor tenía 10 años y él acababa de cumplir los 18, unos hechos por los que la fiscalía pide que sea condenado a cumplir tres años de prisión.

Los hechos que se juzgarán ocurrieron en las vacaciones de Pascua de 2012, cuando el acusado, que acababa de cumplir la mayoría de edad, convenció su primo para que le masturbara en su habitación de la vivienda familiar en un pueblo de Mallorca, a cambio de dejarle una consola de videojuegos, según recoge el escrito de acusación del ministerio público.

El fiscal solicita que el acusado sea condenado a tres años de cárcel por abuso sexual sobre un menor de 13 años y que se le prohíba acercarse a menos de 500 metros de su primo ni comunicarse con él por ningún medio durante ocho años.

Además, reclama que sea condenado a indemnizar a la víctima con 3.000 euros por los daños morales sufridos. El juicio está previsto que se celebre el viernes ante la sección segunda.