Jacinto Rodríguez, un hombre de 84 años, cayó al mar el pasado verano cerca de sa Dragonera cuando navegaba hacia Palma para participar en la Copa del Rey de Vela. Pasó cuatro horas en el agua, de madrugada, sin chaleco salvavidas y con un fuerte golpe en la cabeza antes de ser localizado y rescatado. Rodríguez fue una de las 1.439 personas a las que Salvamento Marítimo auxilió en Balears durante 2015. El Centro de Coordinación de Salvamento (CCS) de Palma participó en 557 actuaciones, una cifra "muy similar a la 2008, cuando se batió el récord histórico de intervenciones", señala el jefe del organismo en el archipiélago, Miguel Félix Chicón.
El de Palma sigue siendo, un año más, el centro de salvamento con mayor número de intervenciones de los 19 de que dispone el ministerio de Fomento en las costas de toda España. Por número de personas involucradas solo fue superado por los de Tarifa y Almería, con 4.342 y 2.816 respectivamente, debido al gran número de pateras detectadas en esas zonas.
En Balears se registraron el 10,1 por ciento de las actuaciones realizadas en todo el país. "La mayoría de las intervenciones se concentra en verano. Solo durante el mes de agosto cubrimos 150", afirma Chicón. El total de servicios creció ligeramente respecto a los 535 de 2014, un incremento que el jefe de Salvamento Marítimo en las islas atribuye al "aumento del tráfico" en las aguas baleares.
En estas incidencias estuvieron implicadas 428 embarcaciones, de las cuales 368 eran de recreo, 28 buques mercantes y 11 de otro tipo. "La mayor parte de las emergencias son por barcos que quedan a la deriva por problemas mecánicos, como una avería del motor o un fallo en el timón", apunta Chicón. Según las estadísticas ofrecidas ayer por el ministerio de Fomento, 467 de las intervenciones estaban relacionadas con el rescate de personas y embarcaciones, 80 con la seguridad marítima y 10 con la protección del medio ambiente marino.
Chicón destaca el incendio del Sorrento, el buque que se incendió en abril a 18 millas de sa Dragonera con 157 pasajeros y 135 vehículos a bordo, como el servicio más complicado de todo el año, por la magnitud del desastre y el número de personas afectadas. Hubo otras intervenciones con vidas en peligro y final feliz, como el rescate de Jacinto Rodríguez el 1 de agosto o el de otro navegante que cayó al mar entre Portocolom y Cabrera el 6 de julio y pasó diez horas en el agua.
En la otra cara de la moneda, casos como el de Natalia Molchanova, la plusmarquista mundial de apnea de 53 años que desapareció el 2 de agosto cuando practicaba este deporte en aguas de Formentera. La intensa búsqueda resultó infructuosa.
