El juez dictó ayer una orden de alejamiento de su pareja y de su bebé de siete meses para el delincuente que huyó con el pequeño en el coche. El sujeto fue detenido el viernes de madrugada tras una espectacular persecución por las calles de Palma.
Sobre las nueve de la mañana, agentes del Cuerpo Nacional de Policía pusieron ayer a disposición judicial al delincuente. Tras prestar declaración, el titular del Juzgado de Instrucción número ocho de Palma apreció la atenuante de drogadicción y decidió dejarle en libertad con la medida cautelar de la prohibición de acercarse a su pareja y a su hijo. El juez apreció que solo había cometido un delito de hurto.
Los hechos, como adelantó ayer DIARIO de MALLORCA, se produjeron la noche del jueves en un domicilio de Cala Millor. El individuo, de 31 años, mantuvo una acalorada discusión con su pareja y se marchó llevándose al hijo que tenían en común, de tan solo siete meses, en un Renault Clio blanco propiedad de ella.
A continuación, la mujer acudió a la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Manacor para denunciar los hechos. La madre del sujeto hizo constar que el joven es consumidor habitual de sustancias estupefacientes y temía por la integridad física de su hijo.
Desde la Comisaría de Policía Nacional se dio aviso a todas las unidades para que se intensificara la búsqueda del Renault Clio blanco donde se había dado a la fuga el hombre con el menor. La llamada se hizo extensiva a la Guardia Civil y a la Policía Local.
Sobre las 23.30 horas del viernes se volvió a tener noticias del delincuente al volante de dicho coche en Palma. En concreto, la Policía Local tuvo conocimiento de que se había producido el robo de un bolso en la terraza de un bar del Paseo del Born.
Los agentes dieron aviso a la Policía Nacional y un dato que era crucial: el delincuente había sido visto huir en un Renault Clio blanco y la matrícula encajaba con la del fugitivo. Tras posteriores pesquisas, los investigadores atribuyeron a este mismo individuo otro robo de un bolso, por el procedimiento del tirón, en la zona del Portitxol, aunque este extremo no se confirmó.
A continuación, Policía Nacional y Policía Local aunaron esfuerzos para dar caza al delincuente. En el operativo se hizo especial hincapié en que había que extremar la precaución dado que un bebé de siete meses viajaba en un sillita en el asiento posterior del vehículo.
La búsqueda no tardó en dar sus frutos. De hecho sobre la medianoche del viernes se localizó el coche. Como era de prever, debido a la adicción a las drogas del conductor, el vehículo y el delincuente fueron detectados en las inmediaciones de Son Banya.
Aunque su hijo de corta edad viajaba en el asiento trasero del coche, el comportamiento del delincuente fue temerario al verse acorralado. El sujeto realizó varias maniobras evasivas para tratar de deshacerse de sus perseguidores. No lo consiguió.
Fuerte resistencia
En un momento dado, el conductor enfiló la carretera de Manacor, en sentido a la capital del Llevant, en dirección contraria. Los efectivos de la Policía Nacional y la Policía Local actuaron de manera conjunta para ir cortándole el paso.
La persecución a gran velocidad se prolongó varios minutos, en la que el conductor del Renault Clio Blanco puso en grave riesgo al resto de automovilistas. Finalmente, a la altura del kilómetro siete, logró ser interceptado. El delincuente opuso una fuerte resistencia a su arresto. De hecho tuvo que ser reducido antes de ser detenido por varios presuntos delitos de robos con violencia, contra la seguridad vial y por daños. El bebé fue llevado a Son Llàtzer, aunque estaba en buen estado.
