Numerosas denuncias anónimas de los vecinos de un inmueble de Can Pastilla señalaban a un piso donde supuestamente se traficaba con marihuana. Investigadores de la Policía Nacional irrumpieron en la vivienda, se encontraron con una plantación y detuvieron al morador por tráfico de drogas.

Tras recabar múltiples denuncias entre el vecindario de la calle Padua de Can Pastilla alertando del trasiego de compradores de droga en un piso, se inició una investigación policial a principios del pasado mes de noviembre.

Las pesquisas de los agentes del Grupo de Estupefacientes del Cuerpo Nacional de Policía confirmaron que las denuncias estaban plenamente fundadas. Así, tras solicitar el correspondiente mandamiento judicial de entrada y registro, sobre la una de la tarde del pasado viernes, los policías irrumpieron en la vivienda.

Los agentes se encontraron en el domicilio una plantación de marihuana de grandes dimensiones. En una caja había un kilo y medio de cogollos listos para su venta. Las plantas de cannabis sativa intervenidas también tenían un peso similar.

Los policías también se encontraron con una gran cantidad de utensilios y fertilizantes para facilitar el rápido crecimiento de las plantas de marihuana. A continuación, el morador, de 34 años, fue detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública.

Por otro lado, un joven polaco de 21 años fue detenido a las 7.45 horas del pasado domingo por tráfico de drogas a la salida de un local 'after' de Gomila. Agentes de la Policía Nacional le interceptaron nada más abandonar el establecimiento y meterse en el coche y le intervinieron 10 gramos de cocaína, un kilo de hachís y dos kilos de marihuana.