El vuelco de un camión de gran tonelaje dejó ayer un herido grave y colapsó la Vía de Cintura durante todo el día. El vehículo acabó en la cuneta del acceso hacia la autopista de Inca, que estuvo cortado durante más de cuatro horas, y las dificultades para izar y retirar el tráiler causaron atascos kilométricos. El conductor, un hombre de 44 años, quedó atrapado en la cabina y tras ser rescatado fue hospitalizado. Sufrió lesiones craneales graves, pero en principio no se temía por su vida. La Guardia Civil investiga las causas del accidente.

El siniestro se produjo a las diez en punto de la mañana, según explicaron fuentes de los servicios de emergencias. El camión circulaba por la Vía de Cintura en dirección a Andratx y se adentró en la autopista de Inca. En el enlace entre ambas vías, un tramo curvo bastante pronunciado, el conductor perdió el control, se salió de la calzada por el margen izquierdo y volcó.

Al lugar acudieron varias ambulancias, dotaciones de los Bombers de Palma, patrullas de la Guardia Civil de Tráfico y operarios del departamento de Carreteras del Consell. Para facilitar su labor se cortó uno de los dos carriles de la incorporación a la autopista de Inca, lo que generó las primeras retenciones. Los efectivos sanitarios y varios testigos rescataron al conductor del camión, atrapado entre el volante y uno de los asientos. El hombre presentaba un traumatismo craneal grave y fue trasladado en ambulancia a una clínica de Palma, donde quedó ingresado. Los bomberos desconectaron las baterías del vehículo para reducir el riesgo de incendio y comprobaron que la carga no suponía ningún peligro.

Los trabajos para retirar el camión siniestrado fueron muy complejos y se prolongaron durante toda la jornada. Una gran grúa acudió al lugar y obligó a cortar por completo la salida de la Vía de Cintura hacia la autopista de Inca durante más de cuatro horas, desde las once y cuarto de la mañana hasta las tres y media de la tarde. Los atascos por el cierre de este tramo fueron creciendo conforme se acercó la hora punta y llegaron en algunos momentos a los dos kilómetros.

La situación parecía ya controlada cuando la grúa consiguió levantar el camión y comenzó su traslado. Sin embargo, apenas pudo remolcarlo unos 200 metros por la autopista de Inca debido al riesgo que suponía la inestabilidad de la carga. El tráiler había sufrido importantes daños en el vuelco y se había abierto un gran boquete en la caja. La operación quedó entonces abortada y se optó por esperar a que la mercancía fuera asegurada. Un carril de la autovía hacia la capital del Raiguer quedó cortado durante buena parte de la tarde a la altura del desvío hacia Son Fuster. Los atascos fueron kilométricos en la Vía de Cintura y se extendieron a la calle Aragón y otras entradas a Palma hasta que, casi a las siete de la tarde, finalizaron los trabajos.