Un turista valenciano de 50 años ha sido arrestado por un delito de daños contra el patrimonio histórico tras haber rayado una pared en el interior del castillo de Bellver.

El hombre estaba visitando el interior del recinto. Se quedó solo en las escaleras de subida hacia la terraza superior y decidió dejar una inscripción en las paredes del edificio, que está catalogado como bien de interés cultural y tiene el máximo nivel de protección.

Mediante un objeto punzante, el hombre comenzó a rayar la pared. Realizó una inscripción de seis letras de unos veinte centímetros de ancho y ocho de alto. La escena fue grabada por las cámaras de vigilancia del recinto. Un vigilante de seguridad le retuvo hasta que llegó la Policía Local para detenerle. La restauración de la pared podría ascender hasta los 4.000 euros.