La Guardia Civil arrestó ayer por la mañana a un hombre que asestó una puñalada a un ladrón que intentó robarle el teléfono móvil en el Passeig de ses Fonts de Sant Antoni (Eivissa). Una ambulancia del 061 trasladó a la víctima, un marroquí de 31 años, a Can Misses, puesto que presentaba una herida de arma blanca en un antebrazo. No llegó a ser atendido porque firmó el alta voluntaria, informó una portavoz del Ib-Salut.

La disputa se produjo sobre las nueve de la mañana. Testigos presenciales explicaron que el magrebí aprovechó el descuido de un hombre de nacionalidad dominicana para intentar sustraerle el teléfono. Según las personas que presenciaron lo ocurrido, el americano sacó un cuchillo de grandes dimensiones y asestó una puñalada al magrebí, que salió corriendo.

Comenzó entonces una persecución por el paseo que sembró el pánico entre los turistas que caminaban por este lugar. La víctima fue dejando un reguero de sangre mientras el agresor esgrimía el arma blanca de forma amenazante, según los testigos. Dos guardias civiles se toparon con la escena y se dirigieron hacia el agresor, que tiró el cuchillo al mar. El sospechoso fue detenido y buzos del instituto armado recuperaron el arma.