La coincidencia de dos accidentes de tráfico casi a la misma hora provocó ayer retenciones kilométricas en la Vía de Cintura y en la autopista de Inca. El tráfico solo comenzó a ser fluido al cabo de hora y media.

El primer siniestro se produjo sobre las nueve de la mañana en un lugar estratégico: el paso subterráneo bajo la rotonda de Can Blau que comunica con el Aeropuerto y el Puerto de Palma. Varios coches chocaron en cadena. Por fortuna no hubo que lamentar heridos, pero el accidente no tardó en considerar embotellamientos de dimensiones considerables.

En apenas unos pocos minutos, el atasco de vehículos se extendió cuatro kilómetros hasta extenderse al desvío hacia Valldemossa. La circulación en la Vía de Cintura en sentido Aeropuerto se antojaba una tarea imposible.

Efectivos de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil se movilizaron rápidamente hasta el lugar del siniestro para tratar de regular la circulación y minimizar los efectos del accidente.

En un principio, el carril izquierdo en sentido Aeropuerto estaba impracticable debido a la colisión múltiple. Los agentes del Instituto Armado lograron que se apartaran los vehículos hacia la derecha para convertir la circulación menos peligrosa.

Sin embargo, apenas cuando había transcurrido media hora del primer siniestro, otro nuevo percance volvió a complicar la situación del tráfico. La avería de un camión procedente de la autopista de Inca que se disponía a tomar el desvío en sentido Aeropuerto volvió a complicar la situación.

Este nuevo incidente multiplicó los atascos para tomar la Vía de Cintura hacia Son Sant Joan. Solo estaba habilitado el desvío en sentido Andratx en la autopista de Inca. Las retenciones en este punto se prolongaron hasta la salida a sa Cabana.

En torno a una hora y media después de producirse la colisión múltiple en el paso subterráneo de Can Blau, el tráfico en la Vía de Cintura hacia el Aeropuerto comenzó a ser fluido. A partir de las diez y media de la mañana, se restableció la normalidad.