Una pareja de delincuentes con numerosos antecedentes amenazó con un cuchillo a un repartidor de mensajería y le exigió la recaudación. Los asaltantes se hicieron con un botín de 500 euros. Agentes de la Policía Nacional les detuvieron poco tiempo después cuando se disponían a entrar en Son Banya a comprar droga.

El asalto ocurrió sobre las 13.15 horas del lunes. El hombre sacó un cuchillo, se lo colocó en el abdomen y le exigió al repartidor que le diera todo el dinero. Le arrebataron 500 euros y emprendieron la huida.

Agentes de la Policía Nacional dieron una batida para tratar de capturarlos. En la Porta de Sant Antoni les vieron subirse a un taxi. Los funcionarios siguieron al vehículo, que se detuvo a la entrada del poblado de Son Banya. Allí los policías les interceptaron y les detuvieron tras encontrarles el dinero robado al repartidor.