Un vendedor ambulante de 39 años se fracturó una pierna el pasado domingo cuando escapaba de una redada de la Policía Local. La víctima no calculó la altura y saltó desde la muralla, sin percatarse de que el desnivel por el otro lado era de unos seis metros.

El accidente ocurrió sobre las 23.40 horas del domingo en las inmediaciones de la Seu. En esos momentos, agentes de la Policía Local de Palma se habían desplegado por la zona procedentes de la Lonja para tratar de combatir la venta ambulante.

Una desbandada de inmigrantes africanos, en su inmensa mayoría senegaleses, se inició para evitar que los agentes les interceptaran y, por consiguiente, les arrebataran la mercancía que trataban de vender.

Los agentes se dividieron en dos grupos para intentar de cortar el paso a los vendedores ambulantes. Unos policías subieron las escaleras colindantes al Palau March para dirigirse hacia la Seu. Sus compañeros, por su parte, se encaminaron hacia Ses Voltes para tratar de interceptarles.

Mientras tanto, un vendedor senegalés de 39 años se agazapó entre unos matorrales para evitar ser descubierto. De repente, el hombre decidió escapar. Se encontraba junto a la muralla y optó por saltarla sin percatarse de la importante altura que había al otro lado. Al parecer, pensó que el desnivel sería de apenas un metro.

La víctima se precipitó desde unos seis metros de altura y se fracturó una pierna. A continuación, agentes de la Policía Local se personaron en el lugar para atender al hombre.

Las asistencias sanitarias del Ib-salut se desplazaron hasta el lugar a bordo de una UVI móvil y trasladaron al herido hasta el hospital Son Espases, donde fue intervenido quirúrgicamente de la fractura en una pierna.