Un centenar de personas, miembros de colectivos ecologistas y animalistas, se concentraron ayer al mediodía para protestar contra el zoo de sa Coma, de donde la semana pasada se escaparon dos chimpancés, uno de los cuales fue abatido por uno miembro de los equipos de búsqueda, mientras que el otro murió ahogado en el depósito de la depuradora de Sant Llorenç.

La muerte de los dos primates provocó numerosas protestas, sobre todo de grupos animalistas, que convocaron una manifestación para pedir el cierre de las instalaciones de sa Coma.

Al mediodía de ayer se concentraron frente al zoo un centenar de personas que portaban diferente pancartas contra el maltrato animal y exigían el cierre del parque.

Los manifestantes repartieron folletos a las personas que se disponían a entrar y les pedían que renunciaran a la visita.

La protesta se deriva de la accidentada huida de dos chimpancés, Adán y Eva, el pasado lunes. La hembra murió abatida a tiros por miembros de los equipos de búsqueda y el macho fue hallado ahogado en un depósito.