Más de medio centenar de efectivos se movilizaron ayer de nuevo por Son Carrió, en Sant Llorenç des Cardassar, para tratar de capturar al chimpancé Adán, fugado el lunes con su compañera Eva del zoo de sa Coma. La hembra fue abatida de un disparo y con el macho no se descartaba utilizar el mismo procedimiento. Ambos simios estaban considerados "agresivos" y "peligrosos".

Efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y varias patrullas de la Guardia Civil peinaron la zona. También el helicóptero sobrevoló las inmediaciones. Miembros de la Policía Local y Protección Civil de Sant Llorenç se sumaron a la búsqueda.

También participaron en el rastreo expertos del Consorcio para la Recuperación de Fauna de las Islas Baleares (COFIB) y personal del zoo de sa Coma. Pese al disparo con munición real descerrajado a la hembra, la orden era de intentar atrapar al macho con vida.

El chimpancé Adán pesa unos 80 kilos y es capaz de levantar en el aire el doble de su peso corporal. Por este motivo, la consigna dada a los distintos efectivos desplegados por la zona era la de extremar las precauciones y no enfrentarse cara a cara con el animal.

De hecho, esa sensación de peligro hizo que algunos de los miembros del contingente movilizado se mostraran reacios a utilizar los dardos anestésicos. "Tarda unos cinco minutos en hacer efecto y en ese tiempo pueden atacar y darse a la fuga hasta perderlos de vista. Cuando despierten pueden volverse mucho más violentos", apuntaron.

La vigilancia se intensificó en un colegio situado en las inmediaciones de un colegio situado en las proximidades del Safari Zoo de sa Coma. Una torreta de este centro se aprovechó para intentar divisar la presencia del simio.

El helicóptero realizó una serie de vuelos rasantes para intentar que el chimpancé Adán saliera de su escondrijo. El principal temor que albergan los servicios de búsqueda era que el simio encontrara refugio en Na Penyal. Su paisaje escarpado y boscoso podría permitirle guarecerse sin complicaciones.

"Cerraré las ventanas"

Una vecina de Son Carrió expresó su temor al saber que el animal seguía aún suelto. "Esperaba que lo cogieran rápido", apuntó. Joan, otro vecino del lugar, indicó que tomaría precauciones. "Cerraré las ventanas y espero que los perros me avisen si se atreve a acercarse", recalcó.

La pareja de chimpancés causó el pánico el lunes en el zoo de sa Coma. Al parecer, un fallo en el sistema eléctrico de los barrotes lo aprovecharon para escapar. Los simios rompieron cristales y escaparon de sus jaulas. Los visitantes y el personal se tuvieron que refugiar en coches y en la cafetería del centro.

Por otro lado, Proyecto Gran Simio, GOB y Anima Naturalis exigieron ayer a las autoridades el cierre del Safari Zoo sa Coma tras la fuga de los dos chimpancés y la muerte de la hembra por disparo de arma de fuego.

El Proyecto Gran Simio solicitó a la Policía Local y al Servicio de Protección de la Naturaleza que así como Eva, la chimpancé, fue abatida por disparos, que se emplee un dardo anestésico para paralizar y no matar a Adán, el macho huido. Esta entidad consideró necesario el cierre del safari-zoo por "negligencia" en el trato de grandes simios y por la inexistencia de un protocolo de seguridad que hubiera evitado esta fuga.

El Grupo de Ornitología Balear (GOB) y Defensa de la Naturaleza recordó que ha denunciado reiteradamente las malas condiciones de esta instalación, de donde en 2009 se escaparon varios ejemplares de antílopes. En 2008, señaló el GOB, tuvo que ser sacrificada una elefanta debido a las malas condiciones de mantenimiento.

Según Anima Naturalis, el centro no cumple con los mínimos exigidos en la ley y pidió a las autoridades medidas de carácter urgente para la clausura del zoo de sa Coma.