Las instituciones encargadas de gestionar el siniestro de la embarcación Sorrento temen que el ferry se pueda hundir en los próximos días. En caso de naufragio y en función de los daños que haya sufrido el transbordador, aumentan las probabilidades de que pueda haber un vertido de los tanques.

Según informaron ayer las autoridades, de momento no hay presencia de combustible u otros contaminantes en los alrededores del Sorrento. La ministra de Fomento, Ana Pastor, aseguró ayer que Salvamento Marítimo y el resto de implicados está trabajando para "minimizar cualquier tipo de riesgo medioambiental" para las Balears.

Pastor se desplazó anoche desde Lisboa hasta Palma -casualmente estaba en una reunión de la Agencia Europea de Seguridad Marítima- para asistir al gabinete de crisis y hablar con los medios de salvamento y víctimas del siniestro. El presidente Bauzá, el alcalde Isern y otros cargos medios del Gobierno, el Govern y el Ayuntamiento de Palma se desplazaron también al dique del Oest.

La ministra explicó que Salvamento Marítimo movilizó desde Algeciras su mejor embarcación, el Clara Campoamor, que llegó hacia las 22 horas al lugar del barco incendiado. Junto con otros navíos del Ministerio de Fomento, como el Marta Mata, se encargó de las tareas de extinción del incendio que a última hora de la noche seguía vivo. Para apagar las llamas los barcos utilizaron espuma.

"La prioridad inicial eran las personas y ahora la prioridad absoluta y máxima es conservar el medio ambiente", afirmó el president balear, José Ramón Bauzá, que no aceptó ninguna pregunta de los periodistas.

El Sorrento transportaba 753 toneladas de sustancias contaminantes. En su mayoría eran combustibles pesados, aunque también había gasoil y aceite. El depósito no se encontraba lleno, ya que la mayoría de buques repostan en la península, donde el combustible es más barato.

El servicio de emergencias de Balears activó el plan Cambal (contaminación accidental de aguas marinas de Balears) ante una posible fuga. Actualmente el plan de contingencia está en estado de prealerta, ya que todavía no hay riesgo medioambiental.

El secretario del Colegio Oficial de Ingenieros Navales y Oceánicos de Balears, Francesc Sastre, explicó a este diario que "es difícil que se produzca un vertido, porque siempre hay una separación entre el casco del barco y el tanque de combustible, que a su vez va protegido por un doble casco".

Según Sastre, el estado del barco y el hecho de que se hayan producido explosiones -varios coches y camiones reventaron por las llamas- pueden agravar la situación. "Un posible hundimiento depende de cómo se propaguen las vías de agua. A veces sucede que al intentar extinguir un fuego, el agua de las mangueras hace que se escore el barco y acelere el hundimiento", agregó.

La naviera Acciona Trasmediterránea ha movilizado ya una remolcadora que partirá desde Tarragona en previsión de que puedan trasladar el Sorrento tras apagarse las llamas. "El peligro siempre existe, pero esperamos que no se hunda", indicó el jefe de Salvamento Marítimo en Balears, Miguel Chicón.

A preguntas de este diario, la ministra Pastor no supo detallar el estado del Sorrento y señaló que los técnicos de Salvamento Marítimo valoraran el estado del transbordador en las próximas horas. "Queda mucho trabajo y mucha noche por delante y vamos a seguir aquí intentando ayudar", añadió la responsable de Fomento.